Autor: Iván González
Consultor principal de Gressa. Ex – ministro de Salud y Protección Social de Colombia
Para hablar de calidad en los sistemas de salud debemos partir del objetivo de estos, como lo describe el Instituto de Mejoramiento de la Calidad de Estados Unidos, los sistemas de salud se basan en la triple meta: mejorar el estado de salud de la población, responder a las expectativas de los ciudadanos y lograr sostenibilidad del sistema teniendo al paciente en el centro. Esta triple meta hace referencia a hacer las cosas mejor y hacer mejores cosas.
Entendiendo esto, existen diferentes retos de los sistemas de salud en América Latina, sin embargo, realizando un acercamiento al contexto ecuatoriano podremos encontrar los siguientes:
- En salud pública encontramos una doble carga, es decir, trabajamos con enfermedades características de la región como las transmitidas por vectores, malaria, dengue, etc., y otras que están asociadas a variables demográficas como la hipertensión, el cáncer y otras patologías crónicas y de salud mental.
- La calidad en la prestación de los servicios de salud no garantiza los desenlaces clínicos en salud.
- Entrada de nuevas tecnologías al sector de manera más acelerada que su adaptación en el sector.
- La cantidad y calidad del talento humano en salud.
- La relación del impacto de fenómenos medioambientales en salud.
- Inequidad en el acceso a servicios de salud.
- Fragmentación en la prestación de los servicios.
- Integración y concentración de actores.
- Gobernabilidad del sistema.
- Recursos limitados vs. incremento de costos.
- Migración.
Es aquí entonces donde recae la importancia de la calidad y de reconocerla como capítulo importante en la agenda pública en salud, ya que mejora la eficiencia y la eficacia, garantiza la mejora continua, permite la costo-efectividad, promueve la humanización del servicio, mejora la seguridad en términos de desenlaces en salud y agrega valor desde varios frentes, principalmente en la oportunidad de los servicios. Dicho esto, para poder generar mayor bienestar a los individuos y a la población es necesario tener un sistema de salud basado en la calidad, un sistema que es capaz de responder a la triple meta desde diferentes acciones que suman al cumplimiento, por ejemplo: el trabajo en salud preventiva, transparencia en el manejo de los recursos, humanizar cada vez más el talento humano, promoción de la investigación clínica, trabajo colaborativo intersectorialmente, fortalecimiento de la seguridad, oportunidad y acceso, adoptación de tecnologías que fortalezcan el sistema, entre otros.
Para poder entender mejor este concepto mencionaremos dos ejemplos realizados en Colombia que pueden servir como referente para propuestas en calidad en salud en Ecuador:
- Modelo de Acción Territorial – MAITE
Este proyecto se centró en trabajar con las regiones colombianas en un modelo de ocho componentes: aseguramiento en salud, salud pública, prestación de servicios, talento humano, financiamiento, enfoque diferencial, articulación intersectorial y gobernanza; esto con el objetivo de trabajar en las necesidades en salud específicas que se diferencian entre zonas en el país.
Las acciones principales se centraron en el diagnóstico específico del territorio y el planteamiento de planes de acción de fácil ejecución para poder articular recursos y enfocarnos en la mejora de la calidad.
Dentro de los resultados se destaca que se logró trabajar con 37 entidades territoriales con planes de acción establecidos, se establecieron más de 1.500 actividades en compromiso con el territorio, se alcanzó el 60% de ejecución, y se generó un posicionamiento y aprendizaje entre las autoridades territoriales en salud, conocidas como las Secretarías de Salud en los departamentos, que sería el análogo de las provincias en Ecuador.
Fotografía 1 – Modelo de Acción Territorial – MAITE tomada del Ministerio de Salud y Protección Social de Colomba
2. Programa AiHospital
Este programa tuvo como propósito mejorar los resultados en salud en todo el territorio para cerrar brechas sociales de inequidad. Este propósito lo logramos a través de cuatro acciones principales:
- Aumentar la transparencia de la información a través de hacer público los indicadores de salud para que todos los colombianos estuviesen al tanto de cómo íbamos en esta materia.
- Trabajar colaborativamente con los actores del ecosistema de salud para poder resolver problemas específicos en los centros de salud.
- Generar incentivos para la activación del mecanismo de pago por resultados.
- Aumentar las coberturas de acciones para la promoción y el mantenimiento de la salud.
Los resultados obtenidos en dos años (2018-2020) evidenciaron un crecimiento de más del 20% ( 51% en 2018 a 75% finales de 2019) de la gestión hospitalaria basándose en los puntajes de los indicadores de salud.
Para concluir, la calidad y el acceso van de la mano en la construcción y fortalecimiento del sistema de salud centrado en el paciente y en sus necesidades, y que las acciones que se realicen para el cumplimiento de la triple meta en salud deben realizarse en el marco del trabajo colaborativo entre los actores del sistema y por fuera de este.